Tradicionalmente,
en la República de Guinea Ecuatorial, la denuncia pública, nunca fue vista con buenos
ojos, así como tampoco lo era el opinar o disentir frente a terceros,
anteriormente los problemas se exponían y se trataban en los entornos comunitarios
y/o familiares, más inmediatos. Sin embargo,
desde un tiempo incierto a esta parte, y en especial tras la abrupta irrupción
de la pandemia COVID – 19, está teniendo lugar un cambio de paradigma en el
país guineo ecuatoriano, el cual se está escenificando principalmente a través del
uso masivo de las redes sociales, Tik Tok e Instagram, por medio de la creación
de contenido digital de denuncia, de opinión y de disentimiento. Ya no se
atenta contra la valentía de nadie a modo de reproche, “ven aquí y lo cuentas”,
solían espetar los residentes en el país guineano, a los no residentes y creadores
de contenido digital que formulaban denuncias y/u opiniones desde el
extranjero. El contenido de estos últimos es ahora recibido de buen agrado por
los residentes, y se comparte con furor entre los grupos de Whatsapp, y demás
redes sociales. Aunque
respecto a los creadores de contenido digital no residentes, merece la pena
destacar que no están exentos del acoso digital o de recibir advertencias y discursos
de odio, o de enfrentar tensiones familiares por manifestar opiniones
públicamente poco populares. A la hora de
analizar los factores que han propiciado el cambio de paradigma, nosotros nos
atrevemos a resaltar entre otros factores, principalmente, al ferviente
ostracismo del mercado laboral y la disminución del poder adquisitivo de la
ciudadanía guineoecuatoriana por la constante tendencia de la inflación al alza, ambos factores están generando un nivel generalizado de descontento
importante. En relación
al primer factor, desconocemos las cifras oficiales de la tasa de desempleo de
la República de Guinea Ecuatorial, pero es obvio que hay una disminución sin
precedentes de la tasa de ocupación laboral, por no hablar del auge del
desempleo juvenil el cual se está materializando en el aumento de la demanda de
visados por estudios en busca de alguna oportunidad, a otros como países como
España, o los Estados Unidos de América. No se puede
negar la evidencia, actualmente es extremadamente complicado encontrar un
trabajo en el país guineoecuatoriano, por el que te paguen o por el que te
paguen mensualmente, con contrato de trabajo común y alta en la seguridad
social. Asimismo, cabe
destacar que las personas desempleadas no están sujetas a un marco legislativo que
les proteja del riesgo de pobreza o de la exclusión social, una vez extinguida
la relación laboral preexistente los desempleados se ven con una mano delante y
otra detrás, hayan estado cotizando o no al sistema de previsión social. No se
puede cuestionar, que en los últimos tiempos se han exacerbado los motivos por
los cuales los creadores de contenido digital formulan denuncias públicamente
en las redes sociales sobre determinadas cuestiones trascendentales que padecen
y conciernen a los ciudadanos del país guineano, con el objetivo de evitar que
se perpetúen situaciones manifiestamente injustas, no se busca una
confrontación deliberada e injustificada contra el ejecutivo guineano, no es
una guerra.
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